Proyecto de día de playa

Al levantarme he visto que a la noche ha estado lloviendo, pero la temperatura es muy buena.

Después de la correspondiente ducha y desayuno, hemos estado viendo la televisión (a ver si nos enteramos de algo que esté pasando en las Olimpiadas). Por fin hemos visto como David Cal ha hecho medalla de plata y hemos podido ver a las rusas, chinas y americanas en natación sincronizada, pero no mucho más.

El cielo se va despejando y hemos decidido, que así como el año pasado nos bañamos en Polonia, este año no va a ser menos y nos vamos a ir, aunque sea, a mojar los pies, así que lo primero que hemos hecho ha sido ir a la playa de Sta. Anne, donde, como véis en las fotos, lo único que hemos podido hacer ha sido eso, mojar los pies.

Eso sí, Txema ha estrenado toalla nueva (ya hemos enviado foto a Juana para que vea que ha cambiado “la horrorosa, horrorosa por una Nike. Según Pedro Mª no va a durarle tanto como la anterior).

Luego hemos ido a visitar Crozon. Al llegar estaban ya recogiendo el mercado que estaba en el centro del pueblo, así que después de sacar dinero en efectivo (nuestra odisea con el pago con las tarjetas ha sido como para ir a la Laboral a montar un pitote grande, grande) con nuestra tarjeta común, hemos vuelto al coche para irnos a Morgat.

Ese pueblo sí que nos ha gustado. Tiene un puerto lleno de chiringuitos, pero de los chulos. En uno de ellos hemos comido: mejillones, huevos con mayonesa, salmón y los 5 adultos hemos pedido raya y la verdad es que nos ha gustado mucho a los cinco.

El café ha caído en otro bar y después hemos dado un paseo antes de ir a Locronan, que teníamos pendiente sacarle fotografías.

Y a ello nos hemos dirigido. El día ha salido radiante y las fotos han salido preciosas (el pueblo está considerado como uno de los más bellos de Francias).

Después hemos hecho las últimas compras: chocolates, chocolates, chocolates varios y pastas, pastas, pastas varias (con todo lo que llevamos comprado, tranquilamente podíamos montar una pastelería).

La vuelta a casa ha sido muy divertida, ya que como véis hemos hecho la última foto de nuestras vacaciones, elegantemente vestidos.

Cena con todas las “sobras”: patés, embutidos, ensaladas varias, sardinas a la barbacoa… esta vez regado con sidra (no con vino blanco del “flojo”, preguntar a Blanca sobre el tema).

Limpieza de casa, recogemos todo, hacemos maletas… y luego, mientras vemos la tele, Juani se dedica, como cada día, a buscar el “lobito” mirando por la ventana.

Hasta una próxima aventura, besos de parte de todos.