Vaya desayuno que nos han preparado. A las nueve en punto teníamos todo tipo de cereales, macedonia, fruta fresca, panes, brioches, bizcochos, yogures, cafés, tés...... y todo acompañado de Steve que no hacía más que preocuparse de si todo estaba bien (los chicos han practicado su inglés y poco a poco van perdiendo la vergüenza, vamos que a Soco y a Ana vamos a cobrarles clases particulares de inglés, por mi parte, y francés, por parte de Juani).
También nos ha contado que es inglés y vinieron hace unos años aquí y él se dedica a la casa de huéspedes y su mujer tiene una pequeña empresa en Inglaterra y viaja unas 10 semanas al año allí y el resto a vivir la vida que son dos días.
La madre de Steve venía hoy desde Gales y su nombre es................ Navarra. Sí, sí, dice que se lo pusieron en honor al nombre de un barco (será el que creen haber encontrado hundido en las costas de Vizcaya estos días ???).
Bueno, la cuestión es que después de empapuzarnos nos hemos ido a Domme, que era donde hoy había mercado y si bien el mercado era muy pequeño, el pueblo ha vuelto a sorprendernos.
Vaya cuestas, vaya casas, vaya tiendas...... pero sobre todo QUÉ CUIDADO LO TIENEN TODO !!!.
Hemos pateado todo el pueblo ayudados por un mapa que Leire y Garikoitz han pedido, EN FRANCÉS, en la oficina de información y turismo (vaya práctica de los idiomas conocidos !!!!).
Después de haber comprado algún que otro producto y regalo para llevar a casa, nos hemos metido en el coche para dirigirnos a La Roque Gageac, con intención de visitarla y comer. Al llegar hemos preguntado por la posibilidad de hacer un viaje en barco por el río Dordogne, pero está tan crecido y hay tanta corriente, que los barcos no salen, por lo menos hasta después de Semana Santa.
El pueblo está excavado en roca y tiene un castillo precioso que no hemos podido visitar porque es de algún milloneti que en estos momentos no se encontraba en el lugar para recibirnos.
La sorpresa del día ha sido que he recibido un mensaje de felicitación de mi cumpleaños, CON 2 MESES DE ANTELACIÓN, de parte de Goio y Juana, pero el Alzehimer hace estragos y cuando hemos hablado con ellos hemos echado unas risas.
La odisea ha sido intentar comer. En todo el pueblo hay unos 8 restaurantes y no hemos encontrado ninguno abierto. Ni siquiera una panadería o pastelería para poder hacernos unos bocatas, así que nos hemos ido directos hacia Castelnaud, donde hemos encontrado una restaurante de lo más apañado.
Después de comer (Garikoitz ha descubierto las patatas con mayonesa y ket
chup) hemos hecho la visita al castillo y nos hemos dado cuenta que la gente hereda los castillos, consiguen que se conviertan en monumento y así el Gobierno destina dinero para su rehabilitación y mantenimiento, mientras ellos siguen siendo los propietarios.
En el castillo había 3 grupos de estudiantes y se han portado muy bien, porque no les hemos oido en todo el tiempo.
Hemos intentado, después, entrar en el museo de la nuez, pero como nos está pasando en todos los sitios, o están renovándose, o abren a partir de abril, o sólo los fines de semana, así que habrá que intentar venir en otra época (lo chocante era que el jardín estaba lleno de nueces hechas de piedra).
Por último hemos visitado Beynac, donde pretendían cobrarnos la entrada al castillo y sólo teníamos 30 minutos para visitarlo, así que lo hemos visto desde fuera, pero el pueblo lo hemos recorrido de arriba a abajo.
Hemos vuelto para darnos una ducha y volver a Sarlat a cenar. Nos hemos ido con intención de comer una pizza, pero cuando hemos llegado al restaurante hemos visto que era para llevar, así que hemos entrado en un chino, donde Rekalde-Bengoetxea comían por primera vez y han salido encantados de la vida.
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