Conic hill–Stirling

Más vale que alguno que otro dijo en su día que él no desayunaba más que un café y un par de galletas, porque casi le tenemos que quitar de desayunar. Ha caído de todo, café, cereales, tostadas con mermelada casera, o con aceite, o con jamón y queso, croisants y garrotes de chocolate, zumos varios…. así que hemos salido de casa hacia Balmaha como unos Reyes.

En el centro de interpretación hemos visto el “perfil” de subida y nos han dado información sobre cómo hacerla

así que todo contestos nos hemos puesto a ello,

qué subida más bonita, incluso con las borrascas que nos han caído, la vista y la temperatura nos han dejado andar tranquilamente

Aunque veáis sol en la foto de arriba, ha sido un espejismo…. las nubes se cernían sobre nosotros;

y cuando hemos hecho cima, hemos aprovechado un claro para dejarle la cámara a una pareja escocesa que nos ha hecho la foto

La bajada ha sido rápida y después de comer los sandwiches de jamón que nos habíamos preparado en casa, nos hemos tomado una café y en el coche nos hemos acercado a Stirling (con parada en el Spar de Stirling a comprar whisky, que no whiskey como se escribe en irlandés).

Lo primero que hemos visto ha sido el monumento de Rob Roy

y la “Old town jail”

Nos hemos acercado al castillo de Stirling, pero nos hemos negado a pagar las casi 13 libras que piden por la entrada,

así, que después de ver el monumento a William Wallace

hemos estado callejeando por la ciudad

incluso hemos topado con la Baker Street de Stirling (Baker Street es una calle del distrito londinense de Marylebone, en la Ciudad de Westminster. Es conocida por su relación con el detective de ficción Sherlock Holmes, que habitaba el 221B Baker Street, una dirección que realmente no existe).

Después, y cuando parecía que se iba a caer el cielo de lo que llovía, hemos decidido volver a casa, ya que eran las 6 de la tarde y llevábamos 8 horas fuera de casa.

Hemos hecho un aperitivo con patatas de vinagre y sal (primera vez que las probaba Noge), y unos pretzels y luego, tras las correspondientes duchas (eso sí, hemos reservado las últimas tres noches en Edimburgo antes que nada) y relajaciones varias, hemos cenado espaguetis con tomate y atún y de postre café con galletas escocesas que nos ha dejado Jenny (la propietaria de la casa).

Como colofón, whisky de “garrafón” del Spar, que han decidido que será buenísimo para futuros carajillos y unos “culicos” de whisky de 10 años que ha comprado Noge.

Mañana queremos subir el Ben Lomond, así que nos vamos a ir pronto a dormir.